Una madre y sus dos hijos, Sam (Corey Haim) y Michael (Jason Patric), se mueven a una pequeña ciudad costera en California. En su nueva ciudad van a tratar de adaptarse de cualquier manera, pero en este lugar extrañas cosas suceden. Los dos hermanos están convencidos de que la zona es frecuentada por los vampiros, ya que en la ciudad se han producido varias muertes misteriosas. Sam, el más joven, se hace amigo de la rana, dos hombres apasionados cómics que dicen ser cazadores de vampiros, mientras que el hijo mayor, Michael, se introduce en una banda de motoristas, entre los cuales es una chica muy hermosa llamada estrella (Jami Gertz). Los componentes de esta banda son más muerto que vivo, pero Michael estaba locamente enamorado de la estrella, que se unirá sin esperanza. Ambos comienzan a comportarse de una manera extraña, aunque no por la misma razón: Michael, por su parte, pasa todo el día durmiendo y fuera toda la noche; mientras que Sam está consiguiendo en algunos problemas a causa de la obsesión de sus amigos, todo para ayudar a Michael.